La restauración bargueño mueble del siglo XVIII, en el taller de restauración y conservación la Barbacana sl ha sido un inmenso placer, pues a la hora de estudiar una profesion tan vocacional como es la restauración y cinservación de muebles antiguos y bienes culturales, el tener un bargueño del siglo XVIII para restaurar es un auténtico placer.
Nos encontramos con esta mueble en mal estado pues le faltaban patas, le faltaba estuco, cerraduras, enbellecedores y grabados en las incrustaciónes de marfil.
Debido a su tipología diseño y estado, se puede saber que es de la primera mitad del siglo XVIII, que tiene incrustaciones de materiales nobles como es el marfil, ébano y madera de nogal y boj.
Tiene unos magníficos dibujos realizados en la incrustaciónes de marfil con motivos florales y de caza, lo que indica que este bargueño antiguo se pudo hacer para una persona de carácter civil con alto poder adquisitivo, como pudo ser un noble o similar.
Se ha restaurado con materiales similares a los originales con la excepción de embutir hueso en lugar de marfil ya que su uso hoy en día esta completamente prohibido.
Se ha limpiado con sumo cuidado respetando la pátina original de la pieza y se ha reintegrado tanto volúmen con estuco fabricado a base de cola de conejo y carbonato cálcico, como cromía con pigmentos naturales para tener una lectura homogénea de la pieza y se han conservado y respetado los materiales originales usando los mismos que estuvieran desprendidos por pequeños que fueran para tener la mayor cantidad de piezas originales.
Se ha terminado con barniz a goma laca con ligera muñequilla, pues este mueble pide un acabado fino pero no exagerado de brillo y por último encerado trasera y cajones.
Esperemos que tenga una óptima conservación para lo que hay que tener en cuenta, no poner el mueble en lugares donde le dé el sol directo pues deteriora y decolora la madera, en un lugar que siemore tenga la misma temperatura a ser posible con un grado estable de humedad para que la madera no se deshidrate y que no esté a rás del suelo. Para su limpieza, basta con un trapo seco de algodón que no arañe el barniz y le quite el polvo.
Espero os haya gustado como siempre
un abrazo
Andrea R. del Collado
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